Al mismo tiempo que
duplicó la indigencia en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) la más rica
del país, Horacio Rodríguez Larreta ajusta en la comida de niños y niñas en
comedores escolares y viandas. Hoy los alumnos y las alumnas de Bajo Flores,
junto a otros tantos en distintas escuelas de la ciudad, recibieron como vianda
un pedazo de pan con una feta de queso y una barrita de cereal (foto). Para los
cientos de miles de niños y niñas que este gobierno arrojó bajo la línea de
indigencia esa vianda representa a veces la única comida diaria. Hasta el año
pasado, las viandas traían un sándwich de jamón y queso y otro de pollo o
pescado, la barrita de cereal y una fruta. Larreta se quedó con el pollo, el
jamón y la fruta. Las mismas estadísticas oficiales indican que la indigencia
se duplicó entre 2015 y 2018 en el distrito porteño. Con la inflación de este
último año el número de pobres e indigentes aumentó considerablemente.
Los
informes desde la UCA hasta UNICEF señalan que niños, niñas y adolescentes son
los más afectados por esos flagelos.
Desde la Unión de Trabajadores de la Educación,
junto a la comunidad educativa y organizaciones sociales venimos reclamando la
emergencia alimentaria en CABA. Es urgente que el Gobierno de Larreta deje de
gastar en propaganda, en marketing y en veredas que se rompen con el único
objetivo de volver a arreglarse y destine esos fondos a salud, educación y
ayuda alimentaria. Queremos que las escuelas tengan su centro en el
conocimiento. Para eso hay que resolver la alimentación de niños y niñas porque
con hambre no se puede estudiar.
Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, lunes 26 de agosto de 2019
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