Rectorado, la Dirección
del CBC y la Secretaria Académica son quienes toman las decisiones y llevan
adelante las políticas que se aplican en el ciclo básico sin mediar ningún tipo
de intervención por parte de les docentes en estas decisiones. Si bien este
destrato de las autoridades hacia el conjunto de les trabajadores docentes no
es nuevo, este dio un salto cualitativo este cuatrimestre al privar a
compañeros de sus salarios y atentar contra la organización gremial.
Hablamos de salto
cualitativo porque con la llegada del actual secretario académico al CBC todos los problemas de los últimos años se
vieron agravados, y los despidos ratificaron esa orientación. A partir de ese
momento se ralentizaron las
designaciones por bajas (jubilaciones, renuncias y fallecimientos) y los pases
de ayudante de segunda a primera. En paralelo, se aceleró la creación de nuevas
cátedras y los llamados a concursos para profesores , que ya sabemos por
experiencia que en el CBC son una trampa antidemocrática para despedir docentes
que incomodan y poner en su lugar docentes alineados. No olvidemos que el
Consejo Superior definió que los profesores concursados en el CBC pasaban a ser
parte de los padrones en sus facultades de origen. La utilización del CBC para
“armar padrón” para los sectores que dirigen la UBA y las facultades tuvo como
agregado además la modificación inconsulta de contenidos mínimos de las
materias y la intervención completa del Rectorado en las finanzas del CBC, lo
que llevó a que toda nueva designación docente pasa ahora por el edificio de la
calle Viamonte.
Esta intervención del
Rectorado llevó a una modificación sustancial de las cátedras y de les docentes
que en ellas trabajamos desde su creación en favor de nuevas cátedras alineadas
con la gestión, ajenas a la historia del ciclo básico. Estas nuevas cátedras,
para nacer y crecer, se nutren de las ya existentes -algunas de ellas ya
reducidas a su mínima expresión- quitándoles comisiones, docentes y
estudiantes.
La pandemia profundizó
las arbitrariedades y discrecionalidades, así como las condiciones precarias de
trabajo. La virtualización de la enseñanza, sin casi ningún tipo de apoyo
institucional y académico ni de herramientas tecnológicas para migrar el aula a
nuestras casas fue un fuerte golpe a las condiciones laborales. Todo el ciclo
lectivo 2020 recayó sobre nuestras espaldas en un “haga lo que pueda” con
comunicaciones por parte de las autoridades a deshoras (hasta domingo a la
noche) y contradictorias de semana en semana. Pusimos nuestros equipos,
nuestros conocimientos, la conectividad, todo a costa de nuestros magros
salario. El resultado fue la atomización de los docentes convertidos casi en
operarios de un call center.
Unos diez trabajadores
fallecieron el último año, algunos de ellos con covid o por covid. La respuesta
de las autoridades fue “tomar” esas designaciones y aprovechar para seguir
erosionando cátedras y “redistribuir” esos cargos en nuevas cátedras fantasmas
que necesitan comisiones para justificar su existencia. El objetivo es seguir
consolidando el padrón afín a las camarillas del rectorado.
¿Hacia dónde va el CBC?
Es claro que con este panorama el ciclo básico se aleja cada vez más de sus
objetivos originales de garantizar un acceso inclusivo a la UBA, perdiendo
calidad académica y reforzando la precarización laboral ya elevada. Los
despidos del inicio de este año son sólo la punta del iceberg y desnudan las
verdaderas intenciones de la política desplegada por la UBA: un CBC cada vez
más básico, menos común con un plantel docente atomizado y disciplinado ante la
amenaza del despido.
Los docentes del CBC
tenemos una larga historia de lucha y movilización en nuestro acervo. Con ellas
logramos las designaciones anuales, evitamos la desaparición del CBC en el
oeste del conurbano, conquistamos los pases de segunda a primera, les
compañeres de matemática pararon la sustracción de designaciones, con la gran
movilización a la sede central pusimos un freno al intento de concursos masivos
para los auxiliares interinos que violaba el CCT nacional. Debemos recuperar
esa historia y decir: ¡NO VAMOS A TOLERAR NI UN DESPIDO EN EL CBC!
Por la restitución en
sus cargos y designaciones de los docentes despedidos.
Basta de fragmentar
cátedras.
Por condiciones dignas
de trabajo. No a la flexibilización y precarización.
Por la democratización
del CBC (Ciclo Básico Común).
Por la aplicación del
artículo 73 y la regularización de les docentes interines. ¡Por el cumplimiento
del CCT (Convenio colectivo de trabajo) nacional!
Comisión
Directiva del CBC, AGD-UBA (Asociación Gremial Docente de la Universidad de
Buenos Aires)
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