En la francesa ciudad de Angouleme, comandada por un dirigente bien de derecha, los bancos de las plazas aparecieron literalmente encerrados en jaulas metálicas que impedían que puideran ser utilizados para esa costumbre humana ancestral que es la de sentarse.
¿A quién se le ocurrió tamaño acto vanguardista? Xavier Bonnefont, el alcade de extrema derecha de la ciudad, develó el misterio y defendió el proyecto. Su vice, Joel Guitton, argumentó que los bancos son usados "casi exlusivamente" por personas que consumen alcohol y drogas a diario, pobres y roñosos que se tiran en ellos a dormir.
A poco andar, los concejales de Angouleme decidieron dar marcha atrás en chancletas después del escándalo que se suscitó en el país de la igualdad y la fraternidad ni bien la noticia se difundió. Las "jaulas" se quitaron, pero Bonnefont sostuvo que aún no se tomó una decisión final. "Continuaremos reflexionando con los comerciantes y vecinos de la plaza de Champs de Mars una solución satisfactoria", dijo. Puf.
No hay comentarios:
Publicar un comentario