Conocimos a Steven Seagal
hace tiempo, cuando rompía brazos y piernas y solito se bancaba victorioso a
cuarenta fascinerosos, como hacían sus colegas Bruce Willis y Jean-Claude van
Damme, todos ellos reyes hace un par de décadas de las películas de acción. Así
brilló en Nico y muchas otras que de
a poco se fueron oxidando y dieron paso a una segunda camada, con un héroe
pasado en kilos, que apenas puede moverse y usa doble hasta para bajar del
auto, filmes de costo todavía menor y filmados en Bulgaria o Checoslovaquia
para abaratar precios y así salieron. Se las puede ver rotar en los canales de
cable a toda hora. Más tarde sorprendió con una suerte de “reality” en el cual
acompañaba una patrulla de policías de verdad y les bajaba línea.
Resulta ahora que en
Arizona se ha dado a conocer una “patrulla” armada por el polémico sheriff del condado
de Maricopa, Joe Arpaio -un facho de aquellos, obsesionado con cazar negros e
inmigrantes-, a través de una sesión de entrenamiento durante el fin de semana pasado,
cuyo objetivo es enseñar cómo usar armas para proteger de ataques a las
escuelas. Para darle brillo al asunto, Arpaio contrató a la “estrella de
películas de acción de Hollywood” Steven Seagal para entrenar a sus
voluntarios. Se utilizaron armas con balas no letales y niños que representaron
a estudiantes asustados.
Tanto Seagal como
Arpaio restaron importancia a las preocupaciones de un grupo de manifestantes
que se encontraba del otro lado de la calle, y que se dedicaron a putearlos
como se debe.
Segal declaró a los
periodistas presentes: “Lo más precioso que tenemos como sociedad y como seres
humanos son nuestros niños, y estoy aquí para tratar de enseñar a la patrulla
sobre armas de fuego y artes marciales y para ayudarlos a aprender cómo
responder más rápidamente y proteger a nuestros niños”. El sheriff Joe Arpaio
agregó: “No creo que tengamos que preocuparnos por nuestra patrulla. Han estado
durante años en los centros comerciales y en todas partes; nunca tuvimos
incidentes. No sé de qué hablan estos manifestantes. Lo digo de nuevo para
estos manifestantes: estamos aquí para proteger a los niños, esa es la misión
principal. Pueden decir todo lo que quieran, pero no voy a detenerme”.
Lo que más bronca nos
da es que alguna vez miramos sus películas con simpatía, y que hace tiempo,
empujados por algún amigo con guiño kitsch, hasta nos bajamos un disco de Seagal
haciendo blues…
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