Cuando la canasta
básica para una familia con dos adultos y dos menores ascendió el mes pasado a
65.000 pesos, y la propia proyección oficial de la inflación es del 50%, esta
"oferta" es una burla. Con las cuotas que aún se deben del acuerdo pactado
en el mes de febrero, una maestra de jornada simple con 12 años de antigüedad
cobrará en el mes de agosto 45.900 pesos. Y recién llegaría a los 52.000 en el
mes de noviembre.
Por otra parte, siguen
sin actualizarse las asignaciones familiares, que hoy están clavadas en 270
pesos, muy detrás incluso que las que se cobran por Anses.
Además, las cifras no
integradas al básico, como se evidenció recientemente en el cobro del
aguinaldo, siguen siendo un problema para la composición del salario que
tampoco se restablece con estas propuestas.
A imagen y semejanza de
los acuerdos nacionales, firmados por Ctera, por debajo de la inflación
prevista de este año calculada en un 50%, lxs docentes seguimos perdiendo.
Por el contrario,
nuestro planteo ratificado en asamblea abierta, es llevar al inicial a 65.000
pesos por un cargo, en el camino a la equiparación con canasta familiar. Además
planteamos temas referidos a las condiciones de trabajo, como la falta de
atención de la ART. Desde Ademys
seguiremos planteando la necesaria recomposición del salario y que la totalidad
de las sumas que componen el salario sean remunerativas.
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