(Prensa Obrera, n. 1351, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, jueves 19 de febrero de 2015)- Está en curso un profundo ascenso de los trabajadores de la educación en Santiago del Estero. El 13 se realizó una marcha por salario y paritarias, convocada en paralelo por una asamblea general de Cisadems (docentes de media y superior) y por los Autoconvocados, que juntó a más de 800 personas.
La columna de autoconvocados reunió a más de 500 docentes, con un gran aporte de jóvenes y muchos maestros y profesores del interior, que mostraron gran combatividad.
Las columnas marcharon unidas durante un trayecto y luego se dividieron. Cisadems, de acuerdo con lo votado en su asamblea, concluyó la marcha frente al Ministerio de Educación, mientras que Autoconvocados continuó su movilización con la idea de llegar a Casa de Gobierno. El fortísimo vallado policial impidió el ingreso de los docentes a la zona de Casa de Gobierno, por lo que se realizó una asamblea cortando la avenida principal de la ciudad.
Tras un escrache al canal de televisión (que es prácticamente un boletín oficial del gobierno), la asamblea autoconvocada decidió impulsar el no inicio de clases -esto va en consonancia con el paro para el 2 de marzo resuelto por Cisadems. Previamente habrá una gran marcha de antorchas a la que se convoca a participar a todos los gremios, organizaciones políticas y sectores sociales.
Se trata, en términos generales, del movimiento más importante en la docencia en los últimos años. De desarrollarse, será indudablemente un revulsivo general para el régimen político zamorista. Los reclamos docentes son los mismos que los del conjunto de los trabajadores santiagueños, que tenemos los salarios más bajos del país. Además, constituyen un acto de rebeldía obrera contra uno de los regímenes más autoritarios y antidemocráticos de Argentina.
El gobierno es consciente de la situación y emitió un comunicado, a través del Ministerio de Educación, en el que ataca a los Autoconvocados y al Partido Obrero particularmente, reiterando que el gobierno "garantiza" un salario mínimo de 4.500 pesos por mes a los docentes (ocultando que el básico es de 1.690 pesos).
Dentro del movimiento docente hay posiciones heterogéneas. La principal tarea ahora es consolidar un plan de lucha unitario y evitar las maniobras divisionistas.
Tribuna Docente participa activamente en todos los escenarios de esta lucha y plantea, en consonancia con la docencia combativa de todo el país, un mínimo inicial de 11.000 pesos, un básico no menor a 7.000, asambleas unitarias a nivel general y por escuela. Convirtamos a la lucha docente en una causa popular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario