Con ello, mueve toda la
escala de aportes.
Esto implica un
tremendo golpe al bolsillo de las y los afiliados, en particular de colegas con
dedicación simple o semi, a los que ya se les hacía un descuento muy por encima
del que le harían en cualquier otra obra social.
Ni que hablar del
abusivo descuento que ya sufren las y los auxiliares estudiantiles y que ahora
se verá reforzado.
Sus salarios quedan
fuera de la garantía salarial pero no de los ajustes.
Sistemáticamente, desde
ADIUNT hemos venido denunciando el vaciamiento de nuestra obra social y el
abandono sufrido durante los meses más duros de la pandemia. Es el rectorado
quien debe auxiliar financieramente a nuestra obra social, ASUNT para que los
servicios no sigan recortándose o desapareciendo.
El manotazo de ahogado
que pretenden dar ahora las autoridades bajo orientación del propio rectorado,
no solo no va solucionar los gravísimos problemas de nuestra obra social sino
que los va agravar, propiciando la desafiliación de muchísimos compañeros y
compañeras.
Desde ADIUNT (Asociación de los Docentes e Investigadores
de la Universidad Nacional de Tucumán) alertamos a la comunidad
universitaria de este gravísimo intento que todavía tiene que ser ratificado
por el Consejo Superior.
Llamamos al conjunto de
los afiliados y afiliadas a movilizarse e impedir este nuevo atropello.
Exigimos la inmediata
publicación de las actas de la reunión del Consejo Directivo de ASUNT del
jueves 30 de septiembre.
Exigimos la apertura de
las cuentas de ASUNT y una auditoria de parte de una comisión de afiliados y
afiliadas, electa en Asamblea.
Exigimos la renuncia de
todos los directores nombrados por el Consejo Superior a propuesta del
rectorado, y la inmediata convocatoria a elecciones democráticas y
transparentes de nuestra obra social.
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