Desde Ademys (Asociación Docente de Enseñanza Media y Superior) denunciamos un nuevo atropello del Gobierno de la Ciudad y del Ministerio de Educación, ya que de manera deliberada y arbitraria, designaron como juradx en el concurso de supervisor Coordinador del Área Curricular al Director General de Educación de Gestión estatal, Fabián Capponi, y también las Juntas de Clasificación propusieron a otrxs tres funcionarixs del Ministerio en la nómina de personas a votar por parte de lxs concursantes (la Directora del Área de Nivel Primario, Nancy Sorfo, al Director de Área de Nivel Medio, Jorge de León y a la Directora del Área de Inicial Susana Basualdo)
Asistimos a otra evidencia de la profunda reforma de nuestras condiciones laborales, denuncia que Ademys remarca de manera única. El antecedente para degradar el carácter democrático y transparente de acceso a los cargos e imponer la elección a dedo, fue la eliminación de las funciones históricas de las juntas de clasificación y de la elección de lxs vocales por el voto directo de lxs docentes. Con las leyes Abrevaya y Gorleri de 2011 y 2015 quitaron esas funciones a las Juntas y la elección de las mismas por los docentes de manera democrática ante la complicidad de la burocracia sindical que no libró la lucha a fondo y actuaron en complicidad con el gobierno contra les trabajadores y sus derechos. En el 2021 y 2022 el Estatuto Docente sufrió nuevas reformas que avanzaron aún más en el control del Gobierno sobre el acceso a los cargos y que incluyen mecanismos que van cerrando el círculo en favor de los nombramientos a dedo. Una de las modificaciones, que pasó desapercibida para muchxs docentes, es la obtención de puntaje para quienes sean designadxs miembrxs del Jurado. Con la última reforma, aquellxs docentes designadxs como jurado obtienen un puntaje equivalente a 0,30 lo que prácticamente equivale a que quienes sean propuestxs y luego designadxs sean lxs únicxs con posibilidades de ascenso. El problema subyace, no en el puntaje en sí, sino en que las Juntas de Clasificación pueden proponer siempre a lxs mismxs docentes y a otrxs nunca.
Otra modificación que da cuenta de la intencionalidad del Ministerio en elegir lxs miembrxs del Jurado más cercanxs a la gestión es que, una vez realizada la votación, en caso de empate, el desempate lo realiza la Junta a puertas cerradas… vaya uno a saber con qué criterios. La consecuencia más clara es la prepotencia con la que este gobierno avanza sobre la Carrera Docente liquidando la transparencia y eligiendo a dedo equipos directivos y supervisores que respondan sin objetar al mando jerárquico inmediato.
¿Qué conducciones necesita la escuela pública?
La pandemia puso blanco sobre negro qué conducciones necesitamos: Hubo directivxs que jugaron un rol progresivo y otrxs que no. Los pronunciamientos de los distritos en contra de volver a las aulas sin condiciones colocaron a estas conducciones en un lugar de confraternización con el resto de lxs docentes. Lo mismo ocurrió cuando lxs concursantes para Ascenso intentaron evitar los exámenes de manera presencial cuando aún estábamos en un período de aislamiento preventivo. De la misma manera, las conducciones que rechazaron las EMI los días sábados jugaron este rol. De esto se desprende la importancia de que las designaciones sean transparentes y en ningún caso sean el resultado del color político de turno.
Por eso desde Ademys, llamamos a denunciar esta situación, exigiendo que se dé marcha atrás inmediatamente a esta designación y a continuar la organización en las escuelas, para luchar junto a toda la docencia para recuperar nuestro estatuto y las juntas con sus funciones históricas:
-Derogación de las leyes Abrevaya y Gorleri.
-El acceso a los cargos de forma transparente y democrática,
-Por la restitución de las funciones históricas de las juntas de clasificación con sus funciones históricas y elegidas por el voto directo de la docencia
-NO a las designaciones a dedo.
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