Así a simple vista podemos ver como en le mes de enero nuestro poder de compra se vio disminuido de manera drastica, siendo la mayor caída en 20 años.
La propia Dirección General de Estadísticas de la Ciudad de Buenos Aires, hizo el impacto de estos porcentajes inflacionarios midiendo los pisos de pobreza e indigencia y dio como resultado que una familia tipo con vivienda propia, necesitó para no ser pobre en diciembre $ *494791.* El salario testigo de una docente de JS de diciembre en la última mesa salarial fue de $ *321519.* Ya se observa que dicho salario se encuentra $170.000 por debajo de la línea de pobreza. Solo representa el 64.98% de esa canasta. En diciembre 2022, el salario docente representaba el 74,9% de dicha canasta.
Desde Ademys (Asociación Docente de Enseñanza Media y Superior) en la Mesa Salarial de diciembre alertábamos la necesidad de preservar el salario de enero pidiendo que el salario por cargo esté por encima de la inflación y que se vaya indexando automáticamente. Pedido que fue desoído.
*¡¡Exigimos ya la reapertura de la mesa salarial para que nuestro salario no siga perdiendo contra el ajuste y la inflación, como así también un aumento de emergencia!!*
No podemos esperar a febrero, que se viene con más aumentos que se verán asociados a los impactos en el transporte, combustibles y alimentos, renovaciones de alquileres, las canastas escolares….
Por un salario por cargo igual a la canasta familiar medida por los trabajadores de ATE-indec del mes en curso y cláusula de indexación automática por inflación.
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